Las empresas intensivas en energía ya pueden optar a ayudas para compensar los costes de emisiones indirectas
¿Te has enterado de que la Comisión Europea ha dado luz verde a España para lanzar un régimen de ayudas de 2.900 millones de euros para compensar parcialmente los costes de emisiones indirectas de gases de efecto invernadero?
El objetivo es apoyar a las empresas más intensivas en el consumo de electricidad y, por tanto, más expuestas al drástico aumento de los precios de la energía. Europa busca con esta medida, que abarcará hasta el año 2030, reducir el riesgo de ‘fuga de carbono’ en el marco del régimen europeo de comercio de derecho de emisiones y evitar que las industrias intensivas en energía trasladen su producción a lugares con objetivos climáticos menos exigentes, al mismo tiempo que promueve una descarbonización rentable de la economía.
Procedimiento para el pago e importe máximo de ayuda
La compensación se concederá a las empresas mediante el reembolso parcial de los costes de las emisiones indirectas asumidos el año anterior y un pago final que se realizará en 2031. El importe máximo de la ayuda será, en términos general, del 75 % de los costes de las emisiones indirectas en que se haya incurrido. Sin embargo, en algunos casos, el importe máximo de la ayuda puede ser más elevado para limitar los costes restantes de las emisiones indirectas al 1,5% del valor añadido bruto de la empresa. El importe de la ayuda se calcula sobre la base de valores de referencia de consumo eficiente de electricidad.
¿Cómo conseguir esta ayuda?
Para poder optar a esta ayuda, las empresas tendrán que cumplir una de las siguientes obligaciones en el plazo de tres años a partir de la concesión de la ayuda:
- Seguir determinadas recomendaciones de auditoría energética
- Cubrir al menos el 30% de su consumo de electricidad con fuentes sin emisiones de carbono (a través de instalaciones de generación de energía renovable in situ, acuerdos de compra de energía sin emisiones de carbono o garantías de origen)
- O invertir al menos el 50% del importe de la ayuda en proyectos que den lugar a reducciones sustanciales de las emisiones de gases de efecto invernadero de sus instalaciones.